Al comprar un Procesador hay 3 detalles clave que debemos tomar en cuenta:
La compatibilidad: Al ser un componente que va montado en la
Tarjeta Madre, hay que
asegurarnos que el zócalo de la placa acepte nuestro procesador.
Frecuencia: Se trata de la velocidad con que abren y cierran los transistores que componen el procesador.
Numero de núcleos: Los núcleos definen el número de unidades de procesamiento central que tiene el chip.
En el caso de los procesadores
Intel la nomenclatura del modelo indica este número; Quad Core (4 núcleos) se representa con una “Q”, Dual Core (2 núcleos) y en esta marca en especial la tecnología se representa en jerárquicamente como; Core i3 (desempeño básico), Core i5 (desempeño intermedio) y Core i7 (de alto desempeño).